Bolsas térmicas

Los dolores musculares suelen ser bastante comunes, especialmente en aquellas personas que llevan un estilo de vida agitado o de alta exigencia física.

En la mayoría de los casos tienen algún tipo de relación con la tensión, la sobrecarga o algún tipo de lesión muscular derivada de un accidente o un movimiento mal realizado.

Por lo general, la dolencia compromete uno o varios músculos específicos, comenzando durante o después de alguna actividad.

Quienes luchan con frecuencia contra esta condición suelen buscar todo tipo de alternativas que les permita tratarlo sin tener que ingerir cantidades excesivas de analgésicos convencionales.

La buena noticia para todos ellos es que hay una serie de terapias naturales que ayudan a disminuir la inflamación para relajar el músculo y calmar el dolor.

Entre estas nos encontramos con unos curiosos sacos térmicos elaborados con semillas, los cuales pueden ayudar a desinflamar las zonas lumbares y cervicales. ¿Te interesa aprender a elaborarlos?

Las bolsas térmicas caseras son un regalo fabuloso para dar durante las festividades. Pueden ayudar a calmar dolores musculares y/o aumentar la relajación. Cuando se utilizan con los aceites esenciales, pueden proporcionar aún más beneficios.

Te presentamos tres opciones para que elijas cual es la que te acomoda dependiendo tu habilidad y tiempo. ¡Encontrarás la opción que sea más adecuada para ti!

¡Sólo diviértete!

POR FAVOR ASEGÚRATE QUE NINGUNA TELA QUE UTILICES TENGA ETIQUETAS YA QUE LO VAS A PONER EN EL MICROONDAS Y PUEDE DERRETIRSE

Aceites esenciales sugeridos (puedes usar tus favoritos):

  • Lavanda
  • Manzanilla
  • Joy
  • Purification
  • Transformation
  • Limón
  • Thieves
  • Cedro
  • Abeto balsámico

OPCIÓN NIVEL AVANZADO

  • 50 cm de franela o tela de algodón puro cortadas en dos pedazos cada uno de 50 x 20 cm
  • 8 tazas de linaza o arroz
  • Máquina de coser
  • Aceite(s) Esenciales

Instrucciones:

  1. Corta la tela en dos pedazos de 50 x 20 cm.
  2. Coloca los dos pedazos uno sobre el otro, los lados de estampado mirándose, y coloque alfileres en los bordes.
  3. Cosa a un centímetro del borde por su alrededor, dejando una boca de 8 cm. Luego dale vuelta por su revés.
  4. Divide el largo de la bolsa en cuatro secciones y márcalas con un marcador de tela.
  5. Rellena la primera sección con dos tazas de semillas.
  6. Cose donde hizo la marca con el marcador de tela. Repita hasta que las cuatro secciones estén rellenas.
  7. Cose la abertura de 8 cm. y está listo.
  8. Para usar, ponlo en el microondas por dos o tres minuto y aplica dos gotas de aceite esencial a tu elección en la tela de afuera.

OPCIÓN NIVEL INTERMEDIO

Lo que necesitas:

  • Toalla de cocina (sin etiquetas)
  • 6 tazas de linaza o arroz
  • Máquina de coser
  • Aceite(s) Esenciales

Instrucciones:

  1. Dobla la toalla de cocina por la mitad a lo largo
  2. Cose a su alrededor dejando 8 cm abiertos y voltéalo por el revés
  3. Rellénalo con las 6 tazas de semillas
  4. Cose la abertura de 8 cm
  5. Para usar, ponlo en el microondas por dos o tres minutos y pon dos gotas de aceite(s) esenciales a tu elección en la toalla.

almohadas-herbales

OPCIÓN NIVEL BÁSICO

Lo que necesitas:

  • Un calcetín
  • 3 tazas de linaza o arroz
  • Aceite(s) esenciales

Instrucciones:

  1. Rellena el calcetín con las semillas
  2. Haz un nudo y está listo.
  3. Para usarlo, colócalo en el microondas por uno o dos minutos y luego pon dos gotas de aceite esencial a tu elección en el calcetín.

Otra forma de elaborarlo:

  • No hay una cantidad exacta de arroz que debas usar, pero se recomienda que el calcetín esté lleno por lo menos hasta la mitad o tres cuartos.[1]
  • No lo llenes hasta el tope. Debe haber un poco de flexibilidad para que la almohadilla pueda descansar cómodamente en tu piel.
  • Querrás que sea capaz de amoldarse a la forma de tu cuerpo.[2]
  • Algunos rellenos alternativos al arroz incluyen maíz, cebada, avena y frijoles.[3]

Considera añadir aceite de lavanda. Si vas a hacer una almohadilla térmica para tratar de aliviar tus dolores de cabeza, puedes añadir un poco de ingredientes a base de hierbas para ayudar. El ingrediente extra que se usa con mayor frecuencia es el aceite de lavanda. Simplemente debes echar unas cuantas gotas (entre 4 y 6) de aceite esencial de lavanda 100 % puro a tu arroz.[4]

  • Lo mejor es mezclarlo antes de poner el arroz en el calcetín.
  • Otras sugerencias para adiciones a base de hierbas incluyen pétalos de rosa, mejorana y romero.[5]
  • Puedes usar hierbas secas.
Amarra o cose el calcetín. Una vez que hayas añadido el arroz, tendrás que asegurarlo al cerrar el calcetín. Para las personas que son hábiles con la aguja e hilo, será bastante sencillo coser el extremo abierto del calcetín.
  • Una opción incluso más sencilla es simplemente atar el extremo del calcetín.
  • Átalo lo más cerca del final del calcetín que puedas.
  • Átalo lo más apretado que sea posible, ya que no querrás que ningún arroz se salga.[6]
 
Calienta el calcetín en el microondas. Ahora que ya has hecho tu calcetín de arroz todo lo que necesitas es calentarlo en el microondas. Simplemente, pon tu calcetín cerrado en el microondas y caliéntalo. El tiempo que debes ponerlo dependerá del tamaño del calcetín y la cantidad de arroz que hayas usado.
  • Entre un minuto y medio y dos será más que suficiente.[7]
  • Siempre vigila el calcetín mientras se calienta en el microondas.
  • Como una precaución de seguridad, puedes poner un vaso de agua al lado del calcetín. Si has añadido hierbas secas, esta es una buena idea.[8]

Consejos:

– Si huele a quemado mientras que la bolsa térmica está en el microondas, lo estarás calentando por mucho tiempo. Trata de reducir el tiempo la siguiente vez.

– Utiliza las sobras de tela para hacer bolsitas térmicas caseras para las manos.

– Las bolsas térmicas caseras son opciones increíbles de regalo. Podrías regalar esta bolsa junto con tu aceite esencial favorito a tus familiares o amigos. Estoy segurísima que les encantará.

Nota del editor:

Si no tienes microondas, puedes calentarlo poniéndolo en el horno en una fuente de aluminio a 65ºC (150ºF) por 15 minutos. Recuerda de poner alarma para no recalentarlo y convertirlo en fuego.

Precaución:

La bolsa térmica casera va a estar muy caliente y puede quemarte si lo calientas por mucho tiempo. Puedes comenzar poniendo tu bolsa por un minuto y las siguientes veces 30 segundos por vez hasta que sientas que la temperatura es la adecuada. Si por accidente lo calientas por mucho tiempo, déjalo enfriar. También podrías envolver la bolsa térmica casera con una prenda de ropa o una toalla para que no te queme tanto.

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